🍁 Whitered Flower🍁

La venganza es un veneno amargo que se esparce por el alma, arraigándose en las heridas más profundas, esas que nunca sanan. Cada cicatriz emocional es un recordatorio constante del dolor sufrido, y en la búsqueda de represalias, ese dolor no solo persiste, sino que crece, como un fuego que se aviva con cada pensamiento oscuro. La traición, una sombra fría y cortante, desgarra el corazón, dejando un vacío que lentamente se llena de resentimiento. Este veneno emocional no solo marchita el espíritu, sino que lo retuerce, convirtiendo cada recuerdo en una espina y cada suspiro en una nueva punzada de sufrimiento. Con el tiempo, el alma se envenena por completo, perdiendo su brillo, consumida por la amargura que se extiende como una marea negra, sofocando cualquier vestigio de esperanza o alegría. Así, el dolor se convierte en un compañero constante, una sombra que nunca se aleja, recordando en cada momento que la venganza solo perpetúa el sufrimiento y que las cicatrices del alma, cuando alimentadas por el rencor, se vuelven heridas que jamás podrán cerrar.