La relación de Dream y Fundy en un comienzo parecía ser el paraíso, pero cuanto más pasaba el tiempo más tóxica se volvía. Dream intentó terminar con su relación, pero Fundy siempre encontraba la forma de hacer que volvieran. No es hasta que a Dream se le ocurre pedir ayuda al único otro chicos gay que conoce, George. Pero George no aceptaría ayudarlo tan fácil. -Lo haré con una condición -dijo George subiéndose sentándose sobre el escritorio-. Quiero que seas mi perra.