Atsushi parpadeó varias veces antes de lograr enfocar en donde se encontraba.
<<¿Una clase?>>.Se levantó del pupitre e inspeccionó a su alrededor hasta que se dio cuenta de varios detonantes. Las paredes estaban cubiertas de placas de acero sujetas por tornillos y una cámara lo enfocaba demostrando que estaba encendida. Intentó recordar cómo había llegado allí, pero sus recuerdos estaban borrosos y eran confusos. ¿Acaso estaba en la academia? Un par de filas de asientos más adelante algo llamó su atención. Se acercó y cogió el colorido folleto que descansaba sobre la mesa:
"Bienvenid@ a tu nuevo hogar, Academia Kibougamine. Ceremonia de inicio en el gimnasio a las 8:00 am ¡No llegues tarde!"
Atsushi buscó con la mirada el reloj del aula <<7:56>>. Se apresuró a abrir la puerta y salir escopetado al pasillo en busca del gimnasio. El pasillo tenía una iluminación fría y un suelo de baldosas ajedrezadas que le daba un toque siniestro, hostil y casi surreal. Atsushi no pudo evitar sentir un escalofrío recorrerle la espalda. Por fin llegó al final de este y se encontró con la entrada al gimnasio. Suspiró nervioso y se preparó para lo que fuera que le esperase al otro lado.
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¡Empieza un crossover donde los personajes de Bungou Stray Dogs están en un universo paralelo que bien podría haber creado el usuario del libro! Atsushi Nakajima, dieciséis años, ha sido ganador de un sorteo que le permitirá entrar en la academia Kibougamine, la más prestigiosa del país, bajo el título de "ultimate suertudo". Todo parece ir sobre ruedas para él, pero no sospecha que en realidad el lugar en que ha ingresado será lo que lo lleve a conocer la verdadera desesperación...
<<Ojalá me hubiera dado cuenta antes de lo que estaba pasando>> Atsushi cerró los ojos y se dejó consolar por la oscuridad.