Mi nombre es Miranda, una recién graduada con la vida resuelta (o al menos eso decían mis profesores) pero no pudieron estar más equivocados; cuando concluí mi carrera universitaria como comunicóloga pensé que sería muy fácil para mi poder posicionarme en una buena empresa pero de a poco las cosas se fueron complicando y con la llegada de la pandemia todo se puso peor para mí, la emisión de mi título universitario tardo mucho tiempo en llegar por lo que se me complicaba encontrar un trabajo donde me pagaran por lo que hacía ya que solo me ofrecían pasantías sin goce de sueldo o con un apoyo económico menor así que tuve que recurrir a trabajos ocasionales como cajera y ese tipo de cosas hasta que un día entre tanta frustración empecé a hacer miles de llamadas y enviar cientos de correos electrónicos a TV Azteca para que me dieran una oportunidad, ante tanta insistencia el departamento de recursos humanos me ofreció un puesto de "todóloga", es decir, iniciaba una nueva temporada de "La Academia" y necesitaban personal que hiciera de todo, microfonear, jalar cables, dirigir al público, etc., no era un gran puesto pero en definitiva el sueldo era mejor de lo que esperaba y también una gran oportunidad para crecer; iniciaron las grabaciones y aparentemente todo iba un poco mejor hasta que conocí a Arturo...All Rights Reserved