-Una semana-
-Su majestad, no la podremos encontrarla en tan poco tiempo-
-¡¡CÁLLATE!! Mi hijo, mi primogénito está a punto de morir, si no encontramos a su hermana, pronto esta familia desaparecerá totalmente.
-Claro majestad-
-Esta misión realízala con total cautela, no dejes que esos cuervos se enteren del plan-
-Claro-
-Muy bien, puedes retirarte-
"Seis años han pasado desde que inicio esta maldita enfermedad que reclama ya el cuerpo de mi hijo, mi querido príncipe heredero, esta es la única solución, tengo que salvar a mi familia y no dejar que esos cuervos tomen el trono, si ocurre eso, lo más seguro es que mi pueblo sufra aún más."
Nota: Los personajes no son de mi pertenencia, los he tomado prestaditos del Kdorama afecto del rey, sin embargo la historia si es de mi pertenecía, espero que la disfruten y disculpen de antemano por las futuras faltas de ortografía.
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.