Después de la muerte de su esposa, Sesshomaru tendrá que lidiar con la paternidad, la vida que poseía fue arrebatada al instante convirtiéndolo en padre soltero dónde tendrá que abandonar sus vicios para poder educar a sus hijas. Sin embargo todo se convierte muy difícil sabiendo que lleva 20 años pensando en un fantasma. Pero sus hijas quieren verlo feliz. ¿Qué harán ellas al respecto?