Nathan lleva mucho tiempo obsesionado con la misteriosa mansión que hay en su ciudad, Porthleven. Está seguro que, de poder adentrarse en ella, descubrirá todos sus secretos y se convertirá en su musa para escribir su primer libro. No obstante, cuando logra hacerlo, descubre que ya hay alguien viviendo en ella. Alguien que, quizá, y solo quizá, consiga que deje de pensar en la mansión para pensar en él.