Aprender a perdonarse es más difícil de lo que se cree, estar en medio de un hermoso camino de rosas, pero sentir una gran tormenta dentro de ti; tener el deseo y la motivación de cambiarlo todo, pero no hacer nada y estar estancada en ese pequeño lago a punto de ahogarte. Alguien que dibuja estrellas sobre tus heridas al mismo tiempo las hace sangrar y tratar de ser suficiente para alguien más, pero no para ti mismo. Al final, después de la tormenta ¿saldrá la luz del día?
1 part