Sofía Granger, se ve obligada a cambiar de vida, dejar todo lo que tenía construido hasta el momento y llegar a Seattle a empezar de nuevo, nuevo instituto, nuevas personas, nuevos conflictos. Alejandra Stevens será la encargada de enredar la vida de Sofía, quien hasta ahora creía ser completamente heterosexual, claro, eso es porque nunca antes se había enamorado de verdad.