Luego de que el trono de Iacos cayera en las manos de Ragnar Morgenstern, el reino se sumergió en el caos. Los anteriores miembros de la corte fueron asesinados o masacrados, y sus familias se vieron obligadas a esconderse entre las clases bajas para sobrevivir. Aegon Sparhawk tenía solo cinco años cuando la corona fue usurpada y su padre fue asesinado. Tenía once años cuando su madre murió en circunstancias desconcertantes, dejándolos a él y a su hermano gemelo, Aodhan, a su suerte. Ahora, a sus veinticinco años, y reconocido como el mejor pintor del reino, es contratado para realizar un mural en el palacio, un peligroso lugar lleno de espejismos y en donde habita una oscura magia que se creía perdida. Los hermanos conocen los riesgos de estar cerca de la familia Morgenstern, pero en el momento en que la vida de Aodhan es amenazada, saben que no tienen forma de escapar. Es por ello que, para protegerlo, los gemelos se harán pasar por una sola persona mientras terminan el trabajo. Sin embargo, las cosas se complican cuando ambos se ven atraídos por Arlina, la bella curandera del palacio, quien carga con un peligroso secreto que podría hacer que Aegon y Aodhan duden de qué es real y qué una ilusión de humo y espejos. Bienvenidos a Iacos.