Tras visitar por años aquella catedral junto a su familia, Mary decide que es suficiente, pues cosas inusuales suelen pasar cada vez que pasa por una vidriera del lugar. Nadie cree en sus palabras, esa vidriera le susurra y la atormenta, sólo a ella. Sin más remedio, decide investigar por su propia cuenta, pero esta ligera curiosidad la llevará a ser juzgada y tachada de satánica por la gente; y todo por indagar en temas con destino a un futuro color carmesí.Todos los derechos reservados