⑇| Sasha no aguantaba la presencia de su compañera. Esa chica nunca se molestó en hablar con nadie, siempre con la mirada fija en su cuaderno, como si de eso dependiera su vida. No entendía porque de repente empezó a sentir cierta curiosidad por aquella pelinegra. Pero necesitaba saber el porqué de su tan desagradable silencio.