Mi amado Odr.

Lo buscó durante siglos sin saber si existía, un anhelo creado por sus sueños, el amor eterno que el destino le tenía preparado, pero no sabía donde estaba, cuando llegaría o la forma en que lo encontraría, ya que perdido en medio del desierto, una bestia a la que el mundo temía se encontraba enjaulada, y el amo de este era la criatura más peligrosa que ha existido, algo incluso más antiguo que los dioses.

Una guerra se acercaba, y su amado estaba en medio de esta, siendo el trofeo que todos buscaban, pero que Freya no dejaría que se escapara de sus brazos ahora que lo había encontrado, sin saber que ese al que llaman Odr, guarda más secretos de lo cualquiera puede imaginar.