Todo comenzó con ella, la chica de la que nunca supe cómo hablar, pero que dejó una huella en mí con solo unas pocas palabras. Aunque nunca supe cómo expresarlo, ese pequeño crush fue suficiente para hacerme cuestionar muchas cosas sobre mí mismo. En este libro, la atracción no es solo un sentimiento, sino una ventana hacia un descubrimiento personal que empezó con algo tan simple como un par de conversaciones y un vistazo a lo que podría haber sido.All Rights Reserved