El amor pasajero va y viene, pero el verdadero, se queda para siempre. Ashley Benson y André Greene experimentaran lo que es el verdadero amor, sin embargo, no podrán mantenerlo, ya que al parecer, el destino no lo quiere así. O quizá, no era realmente amor. No obstante, se puede nadar contra la corriente; o más bien...contradecir al destino.