Kathia y Christopher acuerdan tener una relación falsa con fines distintos cada uno... Kathia renunció a su gran amor... Chrsitopher tiene una oportunidad de intentarlo... Cinco años después deciden hacer valido su trato de comprometerse, sin embargo, hay tres cosas con las que no contó Kathia el día que aquella ceremonia de compromiso tuvo lugar. 1. A partir de allí tendría que compartir techo con su autoritario, dominante y fastidioso prometido Christopher. 2. Su amor con el baile se vería comprometido sobre sus deseos más profundos. 3. Los sentimientos empezarían a estar a flor de piel diariamente con cada nuevo enfrentamiento hacia el "pelele" hasta ser tan confusos de ir perdiendo poder el uno en el otro. Cinco años no son nada para un corazón herido... y mucho menos para uno que anhela ser amado...