En la familia de Edén Jones la iglesia era considerada un segundo hogar, la Biblia el libro más importante del mundo, y Dios la fuerza más grande. Para ellos tener sexo antes de matrimonio era como asaltar un banco. Algo muy malo. Conocer que su hija menor había perdido la virginidad, y, encima, con un no creyente, fue una terrible decepción. Aún así, accedieron a dejar en el olvido ese hecho a cambio de dos cosas: Que Edén se casara con quien ellos quisieran y se fuera a un convento hasta el día de la boda. Sin embargo, no contaron con que el convento abriera sus puertas a un grupo de jóvenes para llevar a cabo un programa de rehabilitación. Entre ellos un falso rubio que haría temblar la "firme" decisión de Edén de complacer a sus padres. ⚠️Queda totalmente prohibida cualquier adaptación total o parcial de esta historia (Obra totalmente de mi autoría y registrada en SafeCreative).
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