Mi vida estuvo llena de altibajos gracias a mi megalomanía, ante mi obsesión por convertirme en alguien por encima de todos termine en los bajos mundos convirtiéndome en un mafioso respetado por todos o eso creía hasta que en una redada sufrí una traición muriendo por parte de uno de los míos. En un momento desperté en otro mundo uno lleno de fantasía, tal vez esta era una segunda oportunidad entregada por dios para convertirme en alguien poderoso.