Paul lleva una vida monótona, la rutina cíclica y su ardua necesidad de mantener una buena economía no le permiten la posibilidad de disfrutar de su vida. Su trabajo como vendedor de juguetes parece ser un infierno, especialmente en épocas navideñas. Todo lo anterior cambia cuando conoce a John, que por obra del destino deciden crear una nueva amistad.