Historia Alternativa: La Gran Republica de Francia
Tras la derrota en la Primera Guerra Mundial, Francia quedó hecha pedazos. Derrotada la vieja coalición del Reino Unido, Alemania, Austria-Hungría y otros aliados, la República Francesa fue destruida y desmembrada, humillada ante el mundo. Durante décadas, una nación fragmentada cargó con la herida abierta de la derrota. Pero en las sombras de esa ruina, germinó algo más peligroso: el odio.
Ese odio fue canalizado y convertido en acción por Jacques de'Bayon, un carismático y calculador veterano de la guerra. Con una mezcla de fervor revolucionario y una ambición desmedida, de'Bayon tomó las riendas de un país quebrado y lo transformó en una potencia resurgente. Bajo su liderazgo, Francia se levantó como una bestia herida pero imparable. La industria fue reactivada, las fuerzas armadas fueron reforzadas hasta alcanzar niveles nunca vistos, y se forjó una maquinaria bélica capaz de desafiar al mundo entero.
La visión de de'Bayon no era solo vengar a Francia, sino construir un nuevo orden mundial, uno liderado por la grandeza francesa. Una revolución internacional que aplastaría al viejo orden de reinos, imperios y democracias, reemplazándolos por un dominio absoluto de su nación sobre Europa y más allá.
En 1940, las fuerzas de Francia desencadenaron un conflicto que cambiaría la historia para siempre. Con un ejército arrollador y una estrategia implacable, el ejército francés cruzó fronteras, luchando desde las costas de Iberia hasta las vastas y heladas estepas de Rusia. Durante nueve años, Europa ardió en un infierno de brutalidad sin precedentes. Ciudades fueron arrasadas, imperios colapsaron y millones de vidas fueron sacrificadas en el altar de la ambición.
Era victoria o muerte, y Francia estaba dispuesta a destruir el mundo si no podía gobernarlo.
