Poemario tan asimétrico como el corazón de su escritor... Los sentimientos no son como las fuerzas de Newton, que tienden a compensarse; ellos se estremecen desordenadamente en libertad; ellos carecen de simetría... No le prometo los versos más hermosos, tampoco los más alegres y, mucho menos, los más optimistas. Si los lee tal vez sean más lágrimas que sonrisas, más penumbras que destellos, más confusión que plenitud. Sea usted mi compañía en este largo viaje por descubrir los más insólitos senderos de un alma asimétrica, sea la vela que ilumine las inexploradas guaridas de un corazón herido, y el soporte sobre el cual apoyarme en cada tropiezo. Tal vez mis sollozos se parezcan a los suyos... solo queda descubrirlo.