Habían sucesos que jamás dejarían de asustar a los más valientes, incluso hasta a los más preparados. Es por eso que, el Superintendente Jack Conway, pese a ser todo un veterano, fue, de igual forma, otra víctima de aquello. Un suicida, un cigarro y una conversación, fue la combinación perfecta para cambiar dos vidas. ... 166.000 palabras. Mi redención por Don't Paint Me. No lazos sanguíneos. Au canon-divergente: La denuncia de Twitter nunca sucedió.