Cuando salen del cementerio se detienen un buen rato en la vereda, como si necesitasen orientarse, o decidir qué hacer de allí en adelante. John echa un vistazo a los otros dos. Ringo baja la mirada. George, en cambio, se la sostiene, y los ojos se le llenan de lagrimas. 24 años tenía, un joven con toda una vida por delante. "¿Y ahora qué?" Se pregunta John, su mejor amigo había muerto y con él una parte de esos tres chicos que se encontraban parados frente al cementerio. La muerte de Paul es esto que está sucediendo, pero no, esta historia no hablara de dobles y conspiraciones, sino de tres simples chicos que de un día para el otro se encontraron con la desgracia de perder a un ser amado.