-¿En qué puedo ayudarte hoy, James? El hombre sonrió tímidamente, agachando ligeramente la cabeza y metiendo las manos en los bolsillos delanteros de sus pantalones negros -Bien -dijo James con una risita- iré directamente al grano, intentaré no robarte mucho tiempo. Sé que probablemente estés ocupada- James enderezó su postura, hinchando el pecho y levantando la cabeza -Te quiero de vuelta Los ojos de Lena se abrieron de par en par, conteniendo lo que supondría una burla disgustada. -Eso es... ¿bueno? -- O aquella en la que para quitarse a James de encima, Kara y Lena comienzan a "fingir" una cita.