Kazuichi Souda y Hajime Hinata habían sido mejores amigas desde rozar la inocente edad de los 3-4 años, cuando se encontraron en el parque local cerca de el hogar de la peli-rosada, la cual aparentemente no tenía sentimientos.
En el cumpleaños de 7 años de Kazuichi, la castaña le hizo una pequeña promesa:
-"Prometo que si alguna vez haces algo malo, nunca se lo diré a nadie."
-"¿Ni siquiera aunque cometa un asesinato?"
-"Si se da el hipotético caso de que eso pasé, ¡te ayudaré a no ser descubierta!"
La felicidad no duró mucho, ya que conforme iban creciendo, ambas chicas fueron teniendo cambios en su personalidad y eso causo que dejaran de hablar tanto cono antes.
Hasta que en el cumpleaños de 17 años de la peli-rosada no asistió nadie, ni siquiera Hajime, y esta guiada por la sed de sangre y la locura cometió la mayor idiotez de su vida.
Le arrebató la vida a uno de sus compañeros, a Sonia Nevermind, para ser más precisos, y Hajime al encontrarse por la zona decidió ir a ver el porqué del grito escuchado y se encontró con la horrible escena de la peli-rosada sosteniendo un cuchillo ensangrentado y el rubio tumbado en el suelo aparentemente muerto.
La castaña claramente llamó a la policía y la peli-rosada al no estar pasando en el mejor momento, sentirse traicionada y no ser consciente de sus acciones aprovecho que aún sostenía el cuchillo y... bueno, le arrebató la vida a la chica que había sido su mejor amiga tiempo atrás y la cual se pasaría el tiempo atormentándola como espíritu el resto de sus días...
Hay quien dice que el infierno es un lugar horrible, un lugar de castigo donde solo van aquellos que cometieron atropellos en su vida.
Sin embargo, no me importa arder en las llamas del infierno si ese infierno es llamado León D'Amore.
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