En una historia, siempre siempre siempre están el héroe y el villano. El grandioso y apuesto héroe es el que se lleva todo el protagonismo y mérito porque aunque le doliera, te sacrificaría por un mundo mejor. Sin embargo, está la otra parte de la historia. La que nunca se cuenta y se queda en el olvido. La del villano que nunca fue escuchado y la que ahora hace que aquel personaje, furioso, vuelva a levantarse de entre las tinieblas para reclamar lo que es suyo aunque eso signifique que tenga que sacrificar el mundo entero solo por la única persona que le importa.All Rights Reserved