Dock Greenwould, Reed Edwards y David Davies solo son tres personas que, por obra del destino, viven juntas en una misma casa que a su vez es una tienda de tés y cafés, en algún lugar de la nueva y creciente Londres en 1965. David fue abandonado por su padre a los 5 años en este lugar, en dónde una pareja poco convencional lo recibe y lo acoge en su regazo. Reed solamente es el novio del dueño, Dock le debía este favor al padre del niño. Mientras más tiempo pasaban juntos, más amor había, más eran una familia. Sin embargo, todo esto tenía una fecha de caducidad, le quedaban pocos años, la hora límite estaba cerca. Solamente querían aferrarse a un sueño imposible.