_Dejame en paz_gritaba.
_Jamas te libraras de mi_ me decía Min
_Ya no te tengo miedo _ le conteste.
_Eres mío!
_Yo no tengo dueño, ni que fuera un animal_ le gritaba molesto.
_Eres mío porque lo digo y más nada.
Senti que una de sus manos rodeó mi cuello, apegandome a la pared, no podía moverme y sentía que el aire no llegaba a mis pulmones, cuando de pronto me soltó, mis piernas me fallaron y fui a dar al piso, tosiendo y tratando de poder respirar, vi como Yoongi acercaba su rostro al mío.
_Regresaras a la casa o tu hijo pagará las consecuencias_me decia amenazante.
Aquellas palabras me enfurecieron.
_Animal, bestia, también es tu hijo idiota_le gritaba.
_Eso dices tu, no le creo a una puta como tu_lo vi sonreír maliciosamente.
_No serás capaz de hacerle nada a nuestro bebé?_hable con miedo.
_Pruebame y verás.
Gi-Hun busca acabar con los Juegos, pero no sabe que In-Ho, el hombre tras la máscara, arriesga todo para protegerlo. Entre la tensión de los retos y las miradas, ambos se acercan peligrosamente, atrapados entre el deseo, los secretos y un sentimiento que podría destruirlos.