Para cuando Ariadna, una escritora reconocida, pero odiada por su propia familia, estaba llegando a su límite, encadenada a un matrimonio violento con un embarazo, producto de los constantes arranques de su esposo, llegó la luz a su vida.
Oliver, un hombre que había pactado con un político manipulador, sucio y detestable, recientemente ascendido como jefe guardia cárcel gracias a su titiritero, la conoció en la cafetería, donde su encuentro fue la salvación para ambos.
Ahogados por estar sobreviviendo el día a día, se alían para enfrentarse a sus enemigos, al inicio con el mismo objetivo, más adelante por el inexplicable sentimiento que nace entre ellos.
¿Lograrían hallar la libertad después de su unión? ¿Sería vana su esperanza o encontrarían el camino a una felicidad como en las historias? ¿Hallarían el amor después de vivir como sombras, reacios a amar y ser correspondidos?
Las votaciones del año 2036 son algo que no me emociona, ya que los candidatos, a mi parecer, no valen la pena, en especial Alejandro Villanueva, aquel chico que se burlaba de mí por mi sobrepeso y al que ahuyenté cuando decidí defenderme. Mi encuentro con él y mi comentario imprudente en la fila para votar es el inicio de una propuesta que no puedo rechazar, así como tampoco puedo negar la profunda atracción y el inmenso deseo entre los dos.
De la noche a la mañana me he vuelto la futura dama y también he descubierto que soy la obsesión del presidente.