Megumi y tu se conocen desde hace ya tiempo y como no si lo conocesn desde que son niños.
Un día tu estabas tan tranquila en casa esperando a tu papá Gojo Satoru , sin saber que ese día llegaría acompañado por un niño más o menos de tu edad , gojo te explico las cosas y apena lograste entenderlas , tras el paso de los días , semanas y meses desarrollaste cierto sentimiento hacia megumi pero no sentimiento de amarlo al contrario empezaste a odiarlo , envidiarlo , celos de el , por que tu padre solo se concentraba la mayoría del tiempo en el y no en ti eso pasó durante la niñez y lo que le continua , siempre peleaban tu y el era de ley pelear todos los días
Al pasar los años seguías envidiando y odiando a megumi aún peleabas con el siempre por ver quien era mejor que quién o solo por que así lo querían y demostrabas más fácil tu odio hacia el aún estando en la misma secundaria y en todos lados estaban juntos , cruzaban una que otra palabra pero no tenía una conversación seguida , ambos eran fríos serios bueno megumi desde pequeño pero tu lo empezaste hacer desde que el llego a tu vida desde aquel día que tu papá lo trajo a casa.
Terminaron la secundaria y pasaron a preparatoria y si seguían peleando se puede decir ambos se envidian y se odian , peleaban todo el tiempo y eso afectaba en su destino que era ser hechiceros , hasta un punto acabaron con la paciencia de gojo y les propuso que se llevarán bien que ya no se tratarán así , no quedaba de otra les dio medio año para intentar llevarse bien oh si no serían expulsados de la preparatoria jujutsu, pero gojo no tendría encuentra que en esos seis meses su hija y megumi se enamorarían
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Encantador, galante, carismático, arrogante, simpático, irreverente, insufrible... Y violento.
Sabía que un chico como Logan Lerman no me convenía. Había escuchado hablar acerca de su prometedora carrera como boxeador... También había escuchado las escalofriantes historias acerca de sus ataques de ira irracional y su vida cargada de excesos.
Sé que es peligroso. Sé que no se toma nada en serio. Sé que, a pesar de lucir como un ángel, es capaz de destrozar el rostro de una persona en menos de tres minutos.
Sé que me va hacer mucho daño... Y también sé que no puedo -quiero- estar sin él.
Él va a destruirme...