Un día, bueno, mas bien noche, no no, mas bien madrugada, Joyce recibe 1 mensaje a su whatsapp de un número desconocido diciéndole que tiene ganas de ir al baño, que le habrá la puerta.
Ella ignora el mensaje y vuelve a dormir, a la mañana siguiente un olor a orina insoportable la despierta y lo mira; su perro Kenay con media sonrisa, tétrico, pensó.
Entró al baño de su habitación con su celular en la mano, otro mensaje:
Xx- Te dije que me abrieras la puerta.
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Será editado cuando termine(?)