Cuando Harry creyó que su vida iba bien, un torbellino con cabello castaño, ojos azules y sonrisa deslumbrante, le hizo entender que a veces estar "bien", no es suficiente. Porque se puede estar mejor, se puede ser feliz.
Dos chicos que se enamoran, la historia no debería de ser tan complicada.
Pero lo es, cuando un matrimonio está de por medio, celos, peleas y obsesión, cuando hay secretos que en algún momento salen a la luz, plagados de montañas de situaciones atormentantes que Harry tiene que descubrir.
Pero cuando azul y verde se mezclan, hasta lo imposible, resulta fascinante, atrevido, intrépido y adictivo.
Porque ni el final de una vida podría detenerlos, ni aunque la noche se alargara o los mares se secaran. No cuando siempre tuvieran algo para aferrarse: "El cielo sobre nosotros", rezaban, con su amor inquebrantable.