Dolor, impotencia, tristeza, eran los únicos sentimientos que rodeaban al sayayin de corazón puro mientras estaba cayendo en un vórtice que era creador por su amigo Zeno-sama, "Todos cayeron, sin importar nada", esto era lo que pensaba el sayayin, recordaba cada escena donde su amigos, familia y conocidos eran acabados, ni siquiera los dioses de la destrucción y ángeles pueden prevenir aquel acontecimiento que acabo con todo.