"Wangji sabía que no estaba bien que un niño dijera groserías, pero se lo permitió ya que se sentía igual de frustrado en ese mismo instante. Todavía no podía creer que su mascota ni siquiera le permitiera acercarse a Jiang Cheng, apenas llevaba viviendo con Wanyin un par de meses y ese fue tiempo suficiente para que su conejo se encariñara demasiado con su pareja."Tutti i diritti riservati
1 parte