La segunda princesa de Arbezela, la hija de la amante olvidada está dispuesta a todo para cumplir con el sueño de su madre de llegar al trono, y si eso implica pisotear y pasar por encima de cualquiera que se involucre en su camino, que así sea. Nada puede detener a Elena Secramise, ni siquiera los lazos de sangre.