Él era un ángel que había caído en las garras del diablo, su nombre de nacimiento Serafín, mala influencia de la oscuridad para que sus padres le pusieran ese nombre, una burla ante la decencia que había mostrado en no caer en las tentaciones mundanas, la descripción del ángel que más se ha resistido a la oscuridad le cabía perfectamente. Luego de que su familia fuera asesinada y solo quedara con su hermana, una mujer los acoge sin miramientos dentro de su pequeña comunidad que les da alojo, comida y guía moral y espiritual Cuando esta mujer muere, les designa a los hermanos encontrar a Clara Lacroixe, hija de esta sacerdotisa que cuido del grial escondido luego de la tragedia Montsegure. Los dos comienzan con una travesía, con largas complicaciones, muchas cosas que aprender y demasiadas discusiones por parte de aquellos personajes testarudos que caminan entre una fina línea de amor y odio. Los designios de la mujer fueron claros buscar del nuevo líder de su fe y cuando las cosas no salen como ellos esperan deberán improvisar esperando no caer en la mayor de las oscuridades.