Entonces, choco con él, cuando se recupero del golpe lo vio a los ojos, fue ahí cuando sus corazones se reconocierón, a pesar de no recordar nada, ambos supierón que se conocian, desde hace quien sabe cuanto, esos ojos miel los habia visto tantas veces, lo sabia, pero no lo recordaba, esperaba verlos y no sabe por que, se mirarón tanto tiempo, hasta que los amigos de este lo hicierón reaccionar, solamente asintio con la cabeza en forma de saludo y ambos rierón nerviosamente y se fue, mirando hacia atras, deseando volver a encontrarse con él, sin saber, que por fin la promesa que habia hecho en su otra vida, estaba tomando rumbo...