¿Que harías si un día te despertases y solo sintieses ganas de correr? ¿Y si te encerrasen para modificarte genéticamente y aprovechar al máximo tu metabolismo? Aline se despierta un día en una habitación blanca, con apenas más ropa que la interior, y una pulsera de plástico con su identidad. Sin noción del tiempo y sin recordar quien es, intenta averiguar que hacen con ella, y con la demás gente que en poco tiempo no tarda en descubrir cuando los encierran en celdas comunes. En poco tiempo, tendrá que aprender a pelear y a defenderse si quiere sobrevivir, porque en RUN, nada es lo que parece.