Los 80s. Una época de gran música, ropa y discos. Época de los famosos walkmans y el comienzo de la nueva era, comienzo de la tecnología y demás cosas; pero como en toda época existían los conflictos bélicos. Los romanos perdieron la mitad de sus territorios en una guerra, la Segunda Guerra Mundial cobró la vida de más de 4 millones de personas, y en efecto, los 80s no se quedaban atrás. Los ataques de EE. UU. en Grenada y Libia se debían a la creciente tensión entre la Unión Soviética con el gobierno americano; la cuál se había estado cociendo desde términos de la antes mencionada Gran Guerra. Aún con todas esas complicaciones la vida seguía, y para un adolescente con acné y poca, me atrevería a decir nula, vida social era fácil de digerir todo eso.
Esta es la historia de como yo, Charles Dickson, vivió cuatro de las grandes guerras de la humanidad con solo 16 años y como al final de esta historia se dio cuenta que la vida es tan frágil como una copa de vidrio, y tan valiosa como el diamante más grande del mundo...
Elliot Jensen and Elliot Fintry have a lot in common. They share the same name, the same house, the same school, oh and they hate each other but, as they will quickly learn, there is a fine line between love and hate.