Alysa es una chica con un pasado que pretende que se quede allí, en el pasado. Aún con esa necesidad de que nadie lo sepa, media cuidad ya conoce lo que tanto quiere borrar. Lo que tanto quiere ocultar.
Pero un día, por un ataque de nervios, o una explosión de emociones contenidas, ella toma la decisión que tanto se negaba a tomar. Porque ella no es una cobarde, pero debe aprender que antes de pelear una batalla, debe reponerse del daño que le causó la guerra. Por ese motivo, se va. Cambia de aires, porque eso es lo mejor que puede hacer, ¿cierto?
¿El problema? Es que no se mudará a cualquier lugar, no. Se irá a vivir con su hermano, y el mejor amigo de este.
¿Qué puede salir mal? Su pasado no tiene por qué afectarla si está en otra ciudad, ¿no? ¿Sus miedos estarán ocultos por mucho tiempo? O mejor aún, ¿alguna vez lo estuvieron?
Arthur Zaens, un multimillonario frío y desalmado que ha vivido en la oscuridad desde la desaparición de su esposa, dejándolo solo con sus dos hijas gemelas. Desesperado por encontrar una niñera que cumpla con sus estrictas expectativas, Arthur conoce a Lía, una ex escritora y editora recomendada por un amigo. Aunque su relación comienza de manera conflictiva, con discusiones y malentendidos desde su primer encuentro en un bar, Lía se convierte en la persona que poco a poco transformará la vida de Arthur y de sus hijas, desafiando su frialdad y cambiando su mundo para siempre.