Hubo alguna vez una criatura muy hermosa... Hubo alguna vez una mortal que amó fuertemente a un ángel sin alas... Fue un día lluvioso, se pronosticaba una gran tormenta y, por ende, ese fue el día elegido. La mortal escogió el escudo más fuerte y tomó su arma, esos demonios pagarían por sus pecados, hoy los mataría, uno a uno moriría.All Rights Reserved