Al principio eran tan ligeros como una idea o un recuerdo que va y viene. No tenían mucho sentido, y podía sobrellevarlos con facilidad.. Creía que era cosa mía Un tiempo después... Las cosas comenzaron a ponerse complicadas. Eran largos, pesados y siniestros., y apenas podía actuar normal. Sentía que mi cuerpo no me pertenecía. Aunque mucho después... Las cosas se tornaron más oscuras. Ya no eran simples alucinaciones, todo comenzaban a tener sentido. Y aquella razón de ser me estaba destruyendo. Así que para cuando él me encontró... Bueno, yo ya no era yo.