Estrellas,estrellas fugaces a las que pides un deseo esperando que se cumpla.
Así ha estado toda la vida Abril,deseando cosas que nunca se cumplen.
Aunque su peor momento fue cuando su mejor amigo,y su primer amor,Azael,la rechazó.
Aunque ella volvió a enamorarse,de su actual novio, Esteban, con él que pudo olvidar a su mejor amigo,pero...
¿No todo puede salir bien no?
Ella creía que al empezar con él,la historia se acabaría ahí, pero fue todo lo contrario, ahí fue justamente cuando empezó todo, cuando los recuerdos volvieron, cuando todo volvió a empezar desde cero, cuando la historia parecía volverse a repetir.
Porque a veces las personas nunca cambian,solo fingen haberlo hecho.
En esos momentos es cuando vuelves a pedir deseos esperando que se cumplan,solo que esta vez dándote cuenta de que tú mismo debes actuar.
Y así,esa misma estrella que te da un destello de esperanza,te guiará y volverá a unirte con tu destino.
Alguna vez se habrán preguntado, ¿cómo se siente tener que destruirte a ti misma por estar con la persona que te rompe y te sana a la vez?
Las cosas inesperadas, casi nunca salen bien. Aunque también es emocionante saber las reacciones improvisadas ante las situaciones imprevistas, como el amor a primera vista.
Mucha gente no cree en eso, Abril era también partidaria de esa opinión. Pero, uno nunca sabe donde va a parar, ni sabe en qué situación se encontrará. El amor es algo que se construye, aunque... ¿Qué pasa cuando solo quedan los intentos? ¿Qué sucede si todo lo construido, se desmorona?
Tal vez el azar del destino jugó a su favor, conocerlo, quizás fue una casualidad o ya estaba escrito, puede que mutuamente sean su punto y aparte, o que sean su causa perdida.
Sea cual sea el motivo, el porqué y el ayer ya no importa, la verdadera pregunta era:
Esto... ¿será un "para siempre"?
"Porque al final, siempre eres tú".