«Los ojos de Alex saltaron del espacio que había entre los tres depredadores y nosotras, pánico puro brillando en sus pupilas, junto con un hambre tan violenta y desbordante que parecía corroer sus facciones.
Una decisión pendía entre ella y yo, tan sumamente importante que podía determinar el rumbo de mi vida, o incluso su final.
Había perdido la esperanza de un Dios hacía ya demasiado tiempo, pero en ese momento recé.
Al cielo, a la tierra, a cualquier cosa que fuera capaz de oírme.
"Por favor", rogué en silencio, "No dejes que la sed de sangre la mate"
Porque si Alex sucumbía a su sed, viviera yo o no, ella no sería capaz de sobrevivir al peso de sus actos.
Sus labios se fruncieron y un ligero siseo emanó de ella. Inhumano, amenazante, aterrador.
Y supe que estábamos jodidas.»
Adriana Costello y Alexandra Costello deciden mudarse a la otra punta del país, a un pueblito llamado Forks, con la esperanza de poder por fin asentarse y llevar una vida lo más normal posible, pero todo eso se va al traste cuando las dos hermanas conocen al trío de hermanos Cullen.
Charlie, Emmett, y Edward Cullen son el tipo de belleza atrayente y de actitudes chocantes que podrían a cualquier chica a cuestionarse sus problemas de abandono paterno.
Pero cuando las sombras de las hermanas las alcanzan y la sed de sangre golpea, hay pocas cosas que ambas no estén dispuestas hacer por deseos de salvar a su pequeña familia retorcida.
"You're different from what I expected," she said softly.
"How so?" he asked, glancing at her.
"I don't know," she replied, searching for the right words. "You just... have this way of making people feel like they matter. Even here, in this... nightmare."
He was quiet for a moment before responding. "You matter, Y/n. Don't forget that."
OR
Y/n wakes up in the deadly Squid Game, surrounded by strangers and fighting to survive. What she doesn't know is that the mysterious Frontman is watching her every move through the cameras- and she's caught his attention.