No es una historia, son vivencias contadas a plenitud por sus protagonistas o antagonistas... Revivir cada palabra que se escriba diariamente o que se lea diariamente hará tener tantas percepciones distintas segun las personas, los comportamientos, las maneras de pensar; a tal punto de ya no tener idea si la historia la cuenta el bueno o el malo, trataremos de ser Sherlock buscando las respuestas solo en nuestros cerebros dejando que el subconsciente engañe a la vista y a la interpretación.