-¿Estás tratando de decirme algo, bebé?- Regina se quedó callada. Esto era parte de su necesidad. Pasó gran parte de su día hablando, ladrando órdenes. Solo quería estar callada por una vez, dejar que alguien más hablara y le dijera qué hacer. Ella sólo quería someterse, ceder el control. Ella no quería pensar. Ella solo quería dejarlo ir.