Tom es el dueño de un reconocido club social, y ni su estatus social ni su baja autoestima le impiden enamorarse de Aki, un prostituto de pacotilla que visita a menudo su club. Tampoco le impiden acostarse con Eddo, inversor magnate que además de ser un manipulador, es un hombre casado.
Una recopilación de escenas sobre las relaciones interpersonales y las microtragedias de la vida privada de 4 personajes, reales, pero no tanto.
[Esta obra es inadecuada para el consumo cotidiano, contiene reflexiones y desahogos de la propia autora. Fue dirigido a una audiencia que consta de como siete personas especifícas, incluyendo a la autora y su expareja. Leer a discreción]
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...