" Si tu ex se va al Infierno....lo normal es seguirla ,¿no? "
Connor Eden Jones es un chico común y corriente . También es el chico que posee la vida por la que muchos mataríamos .Un joven excepcional de excelentes calificaciones ,atleta y capitán del equipo de Fútbol de Winning Vision ,la universidad más prestigiosa ,costosa y codiciada de Europa , bendecido con un cuerpo que desmayaría a los mismísimos Dioses Griegos del Olimpo y prácticamente se baña en el dinero de sus multibillonarios padres y ,por si fuera poco ,su novia es la mismísima April Silver ,alias: la chica más hermosa de esta parte de la galaxia.
Pero..( siempre hay un pero) .
Sin embargo ,del Edén al Infierno existe muy poca distancia ¿no creen?, y descender a la oscuridad es tan fácil como parpadear un segundo antes de que caiga la noche .Solo es necesario un paso para desaparecer en el Averno . Cuando April muestra su verdadero rostro ,el corazón de Edén se deshace en mil pedazos y esa misma noche ...April muere . A Edén se le ofrece la oportunidad de ir al Infierno y rescatar a su desafortunada ex ,el joven no ve otro camino más lógico que aceptarla pues "si tu ex se va al infierno ...lo normal es seguirla ,¿no?" .
Para colmo la única ayuda que posee en esta aventura es la de Nate Blake , exnovio de su exnovia ,su enemigo jurado ,el némesis que aún persigue el amor de April .Él lo odia a muerte y este le devuelve el sentimiento con gusto .En un viaje al infierno para rescatar a la princesa de estos dos caballeros ....¿qué cosa podría ocurrir? ,tal vez...¿ podría surgir amor entre ellos? .y mucho más importante ¿Podrán volver del Infierno al Edén? .
¿Puede una chica romántica y delicada enamorarse de alguien tan ruda como Lynn Loud? Issabella Abrams era esa chica: amante del color rosa, del maquillaje, la poesía, y de las historias de amor. Todo lo contrario a Lynn Loud, quien prefería la acción, los deportes y no se preocupaba demasiado por lo sentimental.
A pesar de sus diferencias, había algo en Lynn que atraía a Issabella. Tal vez era su valentía o su determinación, o quizás el hecho de que Lynn no temía ser exactamente quien era. Mientras que Lynn también sentía cierto interés en Issabella, no entendía como no podía tentarse en ganar y ser la número uno, veía que ella era como una suave brisa que acariciaba el rostro hasta de quien no merecía con dulzura, dulzura que raramente a Lynn le encantaba.