Lisa sueña con detalles gráficos en la que asfixia a una mujer hasta la muerte. Al día siguiente, se entera de que esa mujer es víctima de un brutal asesinato. De ese sueño, Lisa conoce detalles sobre ese asesinato que no se han hecho públicos, detalles que solo el asesino puede conocer. Ella busca la ayuda de la Psiquiatra Jennie Kim, para saber si es una asesina. Pero se entera que tiene personalidad múltiple y que un monstruo llamada, Priya vive dentro de su mente. Lisa no se atreve a amar a Jennie, porque Priya quiere matarla. Jennie mira por la ventana de su dormitorio en medio de la noche y ve a Lisa Manoban apoyada contra un árbol, observándola. Se endereza cuando la ve, se pone erguida y le devuelve la mirada. Por la luz de la farola en la esquina, los ojos de Lisa parecen resplandecer. Casi puede sentir el odio que emana de ella. El mal la envuelve como un aura. Está ahí en su postura, en la inclinación de su cabeza, en el mismo aire que la rodea y está dirigido hacia ella. Pero eso es una locura. Lisa no la odia. ¿Está mirando a Priya?