Mi vida estaba escrita y yo, me conformaba con sobrevivir. Hay un instante en nuestras vidas en el que nos debemos enfrentar a nuestros problemas, sobre todo si los llevamos arrastrando mucho tiempo. Madison Davies estaba estancada en el pasado. Anhelaba todo aquello que tenía. pero a la vez lo rechazaba. Sumergida en la rutina, hasta que un viejo amigo interrumpió con su presencia su monotonía.All Rights Reserved